Cámara de Diputados, 30 de junio de 2010
Personalmente inicié una causa hace mucho tiempo -lleva más de dos años- por asociación ilícita, en la que están imputados el ex presidente Kirchner, Lázaro Báez, Cristóbal López, De Vido, Uberti, en definitiva, gran parte del Gobierno y amigos del poder. En esa causa, que tiene requerimiento fiscal, se citó a Sadous después de un año y medio.
Más allá de eso, si leyeran la denuncia que presenté hace más de dos años, verían con toda claridad lo que estaba sucediendo. Además, lo que hoy se está diciendo ya se hizo público en 2006 a través de un artículo de Jorge Lanata publicado en el diario “Perfil”. Es cierto que en aquella época había otros diarios que no publicaban este tipo de noticias porque tenían acuerdos muy claros con el gobierno, pero otros diarios sí se hicieron eco de la información.
El embajador Sadous –como no podía ser de otra manera- declaró en el marco de esa causa como funcionario público. Hoy podemos decir que esa declaración no es lo más importante que contiene la causa; la verdad es que la declaración de Sadous dice mucho, pero mucho más dice el informe completo de la Defensoría del Pueblo de la Nación que contiene las declaraciones de los empresarios; mucho más dice el Defensor del Pueblo de Venezuela con respecto al tema de los retornos y muchas más cosas deja trascender el cruce que se hizo entre empresas –que ya se presentó en la causa- y la conexión que ellas tienen con compañías de barcazas que operan en la hidrovía Paraná-Paraguay. Esto es lo que se está encubriendo.
Al gobierno no le preocupa este tema; al gobierno le preocupa el tema de la hidrovía Paraná-Paraguay.
La verdad es que me veo obligada a hacer estas aclaraciones, aunque todo esto figura en la causa. A partir del cruce entre empresas nos dimos cuenta de que PALMAT tiene los mismos accionistas que figuran en ciertas empresas de barcazas. Estas empresas, junto con PDVSA, quieren controlar la hidrovía Paraná-Paraguay, porque ahí están en juego cuestiones vinculadas con el petróleo y con los alimentos, pero como ustedes ya saben desde el Matto Grosso hacia acá esa es la mejor ruta para la droga en América Latina.
En consecuencia, es preciso que se vote la conformación de la comisión, pero también es necesario proteger a los testigos, ya que de lo contrario nadie vendría a declarar al Congreso.
Sin duda en todo este planteo hay un objetivo por parte del gobierno. Uno puede defender a un gobierno y a los poderes del Parlamento. Pero, ¿por qué quieren que esto se haga público? Porque quieren amedrentar a los testigos. Esto ya lo viví muchas veces: lo viví con el caso Yabrán y también durante el trabajo que hicimos en la Comisión de Lavado. Al hacerlo público les están diciendo a los otros testigos “¡No vayan!”.
Por estos motivos le inician sumarios y causas penales a Sadous y lo atosigan diciéndole que le van a realizar operaciones a través de la SIDE. Pero todo esto no está dirigido sólo a Sadous; lo que pretenden es que nadie más hable.
Si no recuerdan lo que ocurrió con el tema de la exportación de armas sería bueno que se fijen lo que ocurrió con la investigación sobre el contrato entre IBM y el Banco Nación. Durante ese proceso se mataron testigos; de esto no hace mucho tiempo. ¿Recuerdan los asesinatos de testigos que se produjeron en el marco de las causas por las armas y del contrato entre IBM y el Banco Nación? ¿Por qué mataban a los testigos? Para que otros testigos no aportaran más datos.
El oficialismo podrá estar de acuerdo o no con lo que estoy diciendo, pero lo cierto es que nosotros venimos denunciando estas cosas desde el año 2003, y no desde que dejamos de ser amigos, porque nunca lo fuimos. Nosotros no estuvimos nunca con el diario “Clarín”; tampoco votamos la “ley Clarín”, como sí lo hizo el oficialismo. Simplemente pido que cuidemos a los testigos, porque otros van a tener que venir a declarar ante la Comisión Investigadora de la Deuda. Los testigos seguramente tendrán que venir a una comisión investigadora de obras y servicios públicos, aunque quizás no sea ahora. Podría ser que el oficialismo pierda el poder el año que viene y también quiera investigar, con lo que necesitará lo mismo. No se trata de encubrir a nadie.
Si no se acepta la moción del diputado Aguad, votemos. Como moción propongo que se respeten los testigos y que protejamos a los presidentes de comisión y al Parlamento nacional, porque aquí no estamos para defender al gobierno, sino los poderes y las facultades del Congreso.
Hoy quizás seamos nosotros; mañana, seguramente serán ustedes, pero no usemos al Parlamento para amedrentar testigos, porque si no, no tendremos un testigo más en el Congreso de la Nación.